Contame tu secreto
Hoy se cumplen 80 años de la entrega de San Maximiliano Kolbe en el campo de concentración de Auschwitz. Aquí una reseña que nos hace llegar Angélica Diez, Misionera de la Inmaculada Padre Kolbe.
Celebrar 80 años de la entrega de san Maximiliano Kolbe en el campo de concentración de Auschwitz es recordar un acto que continúa abriendo los corazones a la entrega. En su visita a Auschwitz, el papa Francisco entra a la celda del martirio y, en soledad con el recuerdo de lo que fue, ora en silencio. Después dirá: “El padre Kolbe sabía primerear no se quedaba encerrado, salía siempre al encuentro de todos. Cada ocasión era propicia para evangelizar. Se involucraba en todo y por todos. Toda su vida fue un ofrecerse a los demás a nosotros nos toca recordar; recordar es una expresión de humanidad, recordar es un signo de civilización, recordar es una condición para un futuro mejor de paz y fraternidad”(Papa Francisco, 29/7/2016).
En este hoy de la humanidad, él sigue caminando con nosotros , revelando su secreto:“Camina siempre con María con tranquilidad y serenidad”(E K 722).
Me detengo ante esa realidad con asombro, con gratitud y pregunto: “San Maximiliano, cuando me detengo a contemplarte, te veo haciéndote cargo de las situaciones sin eludir las pruebas que sobrevendrán. Contame tu secreto: ¿cómo lo hiciste? San Maximiliano, cuando leo tus numerosos escritos que emanan vida y esperanza en medio de opresiones, incomprensiones. Contame tu secreto: ¿cómo lo hiciste? San Maximiliano, cuando hablas de la Madre Inmaculada tu corazón se enciende de amor y de ternura en la oración, el apostolado y los medios. Contame tu secreto: ¿cómo lo hiciste? San Maximiliano, tu respuesta me ha llegado, tu secreto me has revelado: “Permanezcan en mi amor” (Jn 15,9). Fue el Maestro quien te inspiró a estar con Él siempre “en salida” primeriando en la caridad al estilo de María en la Visitación, en Caná y en el Calvario celebrando la vida. Hago mío tu secreto, acompañame para dejarme ‘habitar por el Amor’y desde Él donarme con fidelidad creativa en este hoy y en esta ‘hora cotidiana’ para que el Padre sea glorificado. Amén” (A.D.)
Su ejemplo de entrega nos anime a dar un paso más en la entrega cotidiana donde el Buen Dios nos ha colocado para vivir en este momento histórico.
Angélica Diez, Misionera de la Inmaculada Padre Kolbe, Olavarría.
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