REFLEXIÓN

Despedimos a 2020

En el último día del año, le damos la despedida a 2020 y nos preparamos a recibir un nuevo año. Compartimos nuestra mirada y te invitamos a sumar tu aporte para ayudar a construir juntos, entre todos, lo que vendrá.

Terminar un año es tiempo de balances y de esperanzas. Miramos atrás para ver lo que fue, desde la distancia que dan los días, en perspectiva. Y en esa mirada, podemos distinguir lo que fue realmente importante de lo que no dejó de ser intranscendente, por mucho que pareciera otra cosa.

Podemos quejarnos de un año tan especial como fue. Pero se puede abrir el corazón para dar gracias, profundamente, por todo lo recibido en esos días vividos.

Quizá primero por conservar la vida, que no conviene dar por supuesta, y que este tiempo de pandemia nos está ayudando a recordar. Y por la fe. Y por las personas queridas. Y por las dificultades que nos pueden ayudar a crecer…

Miramos adelante para esperar lo que está por venir. Con una espera activa, que se predispone a hacer algo bueno con lo que se nos regale de ahora en adelante.

¿Qué será?

¿Cómo vendrá?

¿Qué podré hacer con esto… o con aquello…?

Quizá hoy es un buen día para pedir, y para confiar.

Un día para agradecer lo recibido, que seguramente si organizamos nuestra escala de valores será mucho.

Un día para pensar que aquello que no fue, o lo que no nos gustó, forme parte de nuestro capital que da forma a la experiencia, a aquello que nos aporta sabiduría a partir de lo vivido, de los vaivenes de esta vida.

Un día para proyectar, para pensar como contribuir a conformar un mundo mejor, a partir de nuestro “metro cuadrado”, de lo que podemos hacer en nuestra familia, en nuestro trabajo, en nuestro territorio, conscientes que nadie nos podrá brindar el bienestar, sino que seremos nosotros los que desde nuestra mente y nuestras acciones, podremos construir el placer de vivir cada día.

¿Hay un nuevo contexto? Si, seguramente lo hay y no es necesario explicarlo.

¿Podemos ser protagonistas en ese nuevo contexto? Si, todos podemos serlo. Desde nuestras acciones, desde nuestras exigencias constructivas, poniendo límites y corrigiendo nuestras acciones y por sobre todas las cosas, sabiendo que nadie nos va a construir el futuro, sino que ese futuro lo construimos entre todos.

Adios 2020. Bienvenido 2021!

BolivarHoy